Coagulantes
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Coagulantes. Fármacos para el tratamiento de las enfermedades de la sangre y trastornos de la coagulación, proceso por el cual, la sangre pierde su liquidez, tornándose similar a un gel en primera instancia y luego sólida, sin experimentar un verdadero cambio de estado.
Este proceso es debido, en última instancia, a que una proteína soluble que normalmente se encuentra en la sangre, el fibrinógeno, experimenta un cambio químico que la convierte en insoluble y con la capacidad de entrelazarse con otras moléculas iguales, para formar enormes agregados macro moleculares en forma de una red tridimensional.
Definición
Coagulantes: Son aquellos medicamentos que por diferentes mecanismos son capaces de favorecer la coagulación sanguínea.
Clasificación
- Sistémicos.
- No sistémicos o locales.
Sistémicos
Entre los sistémicos encontramos:
- Vitamina K: es un principio dietético esencial para la biosíntesis normal de varios factores necesarios para la coagulación de la sangre. Existe Vitamina K1 (Fitonadiona) presente en las hojas verdes de los vegetales, hígado y aceites vegetales. La Vitamina K2 (Menaquinona) y K3 (Menadiona) son sintéticas (no son naturales).
- Estrógenos conjugados (Premarín): es una mezcla de sulfatos de estrona y equilina, obtenida de la orina de yeguas preñadas.
- Fibrinógeno: es el factor de la coagulación.
No sistémicos o locales: (Hemostáticos tópicos)
Son medicamentos de uso tópico, llamados hemostáticos. Provocan la coagulación sanguínea "in situ", especialmente cuando no se puede hacer hemostasia mediante ligaduras o suturas de vasos pequeños y en hemorragias de superficies rezumantes.
- Trombina. Es la que acelera la coagulación estimulando la conversión de fibrinógeno en fibrina.
- Espuma de fibrina.
- Esponja de gelatina.
- Celulosa oxidasa.
Fuentes
- Farmacología Médica. Tomo II. Segunda Parte. pág. 225-234.