Luis Fernández de Córdoba y Arce
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Sintesis Biográfica
Designación y gobierno de Chile
A su llegada a Chile, el gobernador se encontró con que la situación más urgente eran las frecuentes incursiones del cacique mapuche Butapichún. Para contenerlas dividió la frontera con los en dos distritos, uno bajo el mando de su primo Alonso de Córdoba y Figueroa, y otro regentado por el sargento mayor Juan Fernández Rebolledo. A cada uno de estos jefes entregó un nutrido escuadrón, para que como fuerza móvil pudiera usarse en perseguir a Butapichún. Pese a estas medidas, y lograr algunos golpes afortunados contra los indígenas, los malones de Butapichún continuaron. Sugirió al rey, sin mayor éxito, el traslado de la Chile Real Audiencia de Chile desde Santiago a Concepción.
Su rastro se pierde por varios años y no es hasta 1633 que reaparece cuando se unen los buques de su mando de guerra a la escuadra que se formó en la Habana, participando en la expulsión de San Martín de los holandeses que se habían apoderado de ella y en 1938 fue nombrado por Don Felipe IV, Capitán General y Presidente de la Real Audiencia de las islas CanariasGobierno de Canarias
Durante su desempeño como capitán general de las islas debió afrontar las continuas levas y contribuciones impositivas necesarias para el sostenimiento de los ejércitos en la guerra contra Francia y en las sublevaciones de Portugal y Cataluña.
En 1640, zarpa de la barra de Sanlúcar al mando de la Flota de Indias, con la escolta de la escuadra de Gómez de Sandoval, con rumbo a Veracruz, al estar sobre las aguas del Algarbe se encontraron con una es cuadra francesa al mando del marqués de Brézé, entablando combate inmediatamente. En este enfrentamiento se tuvo que retirar y buscar refugio, siendo perseguido por el enemigo, donde demostró su habilidad y decisión, impidiendo el abordaje hasta llegar a la bahía de Cádiz, donde encontró refugioOtros hechos
En 1965, encontrándose en el puerto de Barcelona, con su escuadra fotmada por seis galeones, seis navíos de la escuadra al mando de Masihradi de Ragusa, más cuatro fragatas de la escuadra de Dunkerque, se le comunica de la presencia cercana de una francesa compuesta por diecisiete velas y cuatro bulotes, al mando de Vendome, inmediatamente ordena alistar las naves y salir a su encuentro, luego fue reforzado con buques y galeones, viendo el francés la superioridad de las fuerzas españolas no le quedó más que retirarse.
Después de este acontecimiento no supo más nada de él o al menos no se recoge en los libros de historia