Aceite de Chía
|
Aceite de Chía. Es extraído de una planta de igual nombre, ancestralmente utilizada por los mayas y los aztecas, con importantes propiedades, entre ellas: La semilla contiene un 30% de aceite del cual más del 60% es Omega 3, un ácido graso esencial para el organismo. No tiene ni produce olor a pescado por lo que el consumo de los productos obtenidos o realizados con la semilla de chía no necesitan un empaque y condiciones de almacenamiento especiales para prevenir incluso, los menores cambios ocasionados por el medio ambiente haciendo que los antioxidantes naturales sustituyan el uso de estabilizadores artificiales; haciendo de éste, un cultivo sustentable y ecológico y convirtiendo a la semilla o cualquiera de sus derivados en materia prima ideal para enriquecer una gran diversidad de productos, gracias a su composición química y su valor nutricio, confiriéndole un gran potencial para usarla dentro de los mercados alimenticios.
Propiedades y beneficios del aceite de Chía
- Aporta hierro, calcio, antioxidantes y fibra dietética
- Contiene una gran cantidad de ácidos grasos Omega 3 (62%), los que son beneficiosos en la prevención de las enfermedades cardiovasculares, cardíacas, la hipertensión, la diabetes, para bajar los niveles de colesterol
- Contribuye al fortalecimiento del sistema inmunológico
- Tiene propiedades antioxidantes que protegen al organismo de virus, inflamaciones, tumores y de los radicales libres
- Favorece a la absorción del organismo de vitaminas A, D, E y K
- Al ser un aceite de origen vegetal, si bien tiene los mismos ácidos grasos que los aceites de pescado, es más sabroso y atractivo para algunas personas a las que no les gusta el fuerte sabor del pescado
- Es una fuente importante de vitaminas del grupo B, cuya carencia aumenta el nivel de homocisteína en sangre, lo que contribuye a que se formen depósitos de placas en las paredes de las arterias y aumenta los riesgos de apoplejía y problemas cardiovasculares
- El aceite de Chía no contiene gluten por lo cual puede ser consumido por las personas celíacas
- Aporta un alto contenido de calcio (una semilla entera de Chía contiene 714 mg mientras que la leche tan sólo 125 mg), magnesio, potasio, hierro, fósforo y cinc
- Aporta una buena cantidad de fibra soluble, la que baja los niveles de glucosa en sangre y disminuye la absorción del colesterol
Usos y aplicaciones
Este aceite puede utilizarse a través del aceite de sus semillas, cultivadas en forma orgánica, prensadas en frío y sin proceso de refinado. Dado su alto contenido de Omega-3, bastaría con ingerir apenas unos gramos de aceite (una cucharadita) en crudo, a fin de cubrir las necesidades diarias de ácido linolénico. Dada la baja proporción de Omega 6 en su composición, la mezcla con aceite de girasol permite obtener un equilibrado suplemento de AGE, con la relación ideal entre los omegas 6 y 3 de 4 a 1. Son aceites para consumir en frío y sin proceso alguno de cocción, a fin de preservar sus delicados principios nutricionales.
Propiedades terapéuticas
Las semillas aportan los siguientes efectos: antioxidante, antiagregante plaquetario, antiinflamatorio, antimutagénico, anticarcinogénetico, antiviral, laxante, hipotensor, hipocolesterolemiante, hipoglucemiante, inmunoestimulante, tónico cardíaco y nervioso, y alimento mineralizante, vitamínico y proteico. El consumo de este aceite resulta útil en casos de celiaquía, depresión, estrés, diabetes,obesidad, problemas gastrointestinales, tumores, artritis, asma, afecciones cardiovasculares y pulmonares, soriasis, arteriosclerosis, anemias, embarazo, lactancia, crecimiento, convalecencias y debilidad inmunológica.