Helheim
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Helheim. Reino de las almas de los muertos, cuando no puden entrar al Valhalla, en la mitología escandinava. También eran los dominios de la diosa Hel (Hela).
Ubicación
Es uno de los nueve mundos pertenecientes al Yggdrasil; situado bajo tierra en la parte inferior del árbol cósmico.
Extensión
Helheim rodea el mundo de tinieblas septentrional, llamado Niflheim (o Nifelheim). Es una de las partes más oscuras y tenebrosas de ese enorme y gélido reino.
Acceso
Para acceder al Helheim hay que sufrir una dura travesía, atravesando frías, lúgubres y siniestras regiones del norte.
El camino se denomina Hellway y la distancia que hay para recorrer es muy extensa hasta llegar a las puertas de Hel.
Gjallarbrú
El Gjoll, un río de aguas heladas por las que fluyen cuchillos, es el límite de Niflheim, sobre el cual se halla un puente de cristal y oro (Gjallarbrú), sostenido tan solo sobre un cabello y vigilado constantemente por una giganta llamada Modgud. Esta le permitía cruzar a los que recién habían muerto, luego de interrogarles sobre su nombre y su asunto.
Los espíritus atraviesan el puente calzados con un par de zapatos ultra resistentes, denominados "zapatos de Hel", para así no sufrir a través del camino. Avanzan encima de caballos o en carretas.
Bosque de acero
Una vez atravesado el puente se llega a "el bosque de acero". El bosque muestra una colección siniestra de árboles constituidos por hojas de acero.
Helgate
Luego de cruzar el Bosque de acero, finalmente se arriba en las puertas de Hel Helgate donde habita siempre en guardia el espeluznante perro llamado Garm (Garmr). Se halla refugiado en una cueva llamada Gripa, posee cuatro ojos y un pecho empapado de sangre. Solo se puede calmar su ira con una ofrenda, la cual se llama "pastel de Hel", nunca fallará siempre y cuando el que se lo de le hubiese dado con anterioridad pan al hambriento.
Residencias
Nastrand
El Nastrand (playa de cadáveres) es una sala dentro del reino de Hel donde irán las almas de las personas viles, los asesinos, los perjuros y los mentirosos notorios. También en Nastrand como en el resto del Helheim el sol nunca brilla y las puertas de la sala se abren todas hacia el norte. Las paredes están cubiertas con serpientes que miran todas hacia adentro, escupen sin parar veneno, así que este fluye en torrentes por la sala y llena todo con vapores venenosos. [1]
Curiosidad
El término "Hell" (infierno en inglés) es un derivado de Hel o Helheim. [2]
