Cómo pelar una calabaza

Las calabazas son famosas porque puedes convertirlas en linternas de Noche de Brujas. Sin embargo, también puedes usar este tipo de calabazas para hacer varios platillos deliciosos. No obstante, para hacerlo, debes pelar la cáscara. A diferencia de las calabazas usadas para tallar, las calabazas para cocinar tienen cáscaras más gruesas que cubren el fruto pulposo. Pelar la cáscara no te resultará difícil si usas un pelador de vegetales o un cuchillo filoso y un poco de dedicación.

Método 1

Método 1 de 3:

Pelar la calabaza con un pelador de vegetales

1
Lava la calabaza para quitarle la suciedad, los elementos contaminantes y para suavizarle la cáscara. Retira la suciedad y otros elementos contaminantes de la cáscara sumergiendo la calabaza en agua tibia para lavarla. Retirar la suciedad evita que la calabaza comience a pudrirse. Además, el agua tibia suaviza la cáscara, lo cual hace que sea más fácil pelarla. Seca la calabaza con un paño limpio y deja que se seque con el aire.
2
Corta la parte superior e inferior redondeada de la calabaza para crear superficies planas. Coloca la calabaza de lado sobre una tabla de cortar resistente. Corta aproximadamente 6 mm (0, 25 pulgadas) de la parte superior e inferior de la calabaza con un cuchillo filoso, de manera que tenga dos lados planos.
- La calabaza debe ser capaz de sentarse firmemente en la parte superior e inferior después de hacer los cortes.
3
Acomoda la calabaza y el pelador. Voltea la calabaza de lado sobre una tabla de cortar de manera que un lado plano apunte hacia ti y el otro lejos de ti. Toma el pelador en una mano y usa la otra para mantener la calabaza quieta mientras la peles.
4
Pela la cáscara con el pelador comenzando desde el lado más cerca de ti. Al igual que al pelar una papa, empuja el pelador en línea recta comenzando desde el lado más cerca de ti y avanzando hacia el lado más lejano.^{[1]
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Fuente de investigación}
- Debes tener como objetivo cortar tiras de aproximadamente 3 cm (1 pulgada) de ancho y tan largas como la parte lateral de la calabaza.
- Procura no solamente cortar la cáscara y dejar la pulpa intacta. La cáscara es la capa más externa que cubre la pulpa más gruesa.
5
Gira la calabaza para continuar el proceso de pelado. A medida que termines de pelar las secciones, voltea la calabaza sobre lados diferentes.^{[2]
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Fuente de investigación} Antes de continuar pelando otro lado, recuerda estabilizar la calabaza con la mano libre.
6
Inspecciona la calabaza y revísala para asegurarte de haber pelado toda la cáscara. Probablemente, hayas dejado pasar algunas partes mientras la pelabas. Dale vuelta a la calabaza y revísala para determinar si tienes que volver a pelar las zonas que no pelaste por completo.

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Método 2

Método 2 de 3:

Pelarla con un cuchillo

1
Prepara la calabaza para pelarla. Lava la calabaza y deja que se seque. Luego, corta la parte superior e inferior para crear superficies planas.
2
Coloca la calabaza de lado y alista tu cuchillo. Al igual que cuando usas un pelador de vegetales, colocarás la calabaza sobre una tabla de cortar con una de las superficies planas apuntando hacia tu cuerpo. Sostén el cuchillo en tu puño con la hoja apuntando hacia afuera.^{[3]
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Fuente de investigación}
3
Corta las tiras de cáscara empujando el cuchillo a lo largo de la parte lateral de la calabaza. Debes ser capaz de ver la parte en la que la pulpa interna de la calabaza se una con la cáscara externa. Empuja la hoja del cuchillo en la calabaza desde el extremo más cercano hacia el otro extremo. A medida que termines las secciones, gira la calabaza hasta pelarla por completo.
- Asegúrate de empujar el cuchillo de forma lenta y pausada de manera deliberada para evitar que te cortes los dedos. Hacerlo también reduce el riesgo de cortar la pulpa.^{[4]
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  Fuente de investigación}
4
Revisa la calabaza para asegurarte de pelar toda la cáscara. Gira la calabaza por completo y determina si hay lugares que hayas pasado por alto antes de pelarlos.

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Método 3

Método 3 de 3:

Cocinar la calabaza antes de pelarla

1
Prepara la calabaza lavándola y cortándola en secciones más pequeñas. Dependiendo del tamaño de los artefactos de cocina, corta la calabaza en mitades o en más secciones. Después de hacerlo, usa una cuchara grande para quitar las semillas y las otras fibras de la parte interna de la calabaza y colócalas en un tazón.
- ¡Las semillas internas de la calabaza son comestibles y pueden ser una merienda deliciosa! Puedes guardarlas para usarlas posteriormente o asarlas cuando cocines la calabaza.^{[5]
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  Fuente de investigación}
2
Hornea la calabaza en un horno. Precalienta el horno a 190 °C (375 °F). Coloca la calabaza en mitades o secciones en una bandeja para hornear. Una vez que el horno se caliente, coloca la calabaza en él y cocínala durante 15 a 45 minutos dependiendo del tamaño de las secciones.^{[6]
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Fuente de investigación}Revisa el progreso introduciendo un tenedor en la pulpa. Cuando el tenedor perfore la pulpa fácilmente, retira la calabaza del horno y deja que se enfríe.
3
Cocina la calabaza usando un microondas. Coloca las secciones de la calabaza en un recipiente apto para microondas con una cantidad pequeña de agua.^{[7]
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Fuente de investigación} Cocina la calabaza durante aproximadamente 10 minutos y verifica el progreso usando un tenedor. Una vez que puedas perforar la pulpa de la calabaza fácilmente con un tenedor, retira la calabaza del microondas y deja que se enfríe.
- Dependiendo del vataje del microondas y el tamaño de los tajadas de la calabaza, el tiempo de cocción puede variar. Vigila la calabaza de cerca revisándola periódicamente mientras se cocine.
4
Pela la calabaza usando el método del pelador de vegetales o el método del cuchillo. La cáscara debe salir con mayor facilidad. Sin embargo, continúa siendo cuidadoso cuando uses utensilios de cocina filosos.^{[8]
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Fuente de investigación} Observa la calabaza y pela cualquier zona de la cáscara que hayas pasado por alto.

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