Casa de la Cascada
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Historia
Frank Lloyd Wright diseñó en 1934 -1935 una casa extraordinaria en la Reserva Natural de Bear Run, Pensilvania, a 1298 metros sobre el nivel del mar. En el lugar seleccionado corre un río que cae repentinamente 30 metros.
Esta edificación fue construida como casa de fin de semana para Edgar Kaufmann, su señora y su hijo. Este lugar había sido propiedad de la familia durante 15 años, y, cuando le encargaron a Wright el diseño de la casa, tenían en mente una casa enfrente de la cascada, para poder apreciarla. Sin embargo, Wright integró el diseño de la casa con la propia cascada, posándola justo encima de ésta.
Los propietarios originales la vendieron a la Fundación Frank Lloyd Wright y desde 1964 la casa se abrió al público y funciona como museo. En la actualidad tanto la arquitectura, como el mobiliario y la tapicería, diseñados también por el arquitecto, permanecen intactos.
Es un monumento nacional en Estados Unidos.
Estilo arquitectónico
La Casa de la Cascada sigue los principios de "arquitectura orgánica" enfatizados por Wright en su escuela y estudio Taliesen. Básicamente consiste en integrar en una unidad (edificación) los factores ambientales del lugar, uso y función, materiales nativos, el proceso de construcción y el ser humano o cliente.
Descripción
Wright resolvió el diseño de la casa alrededor de la chimenea, el corazón de la casa, la que se consideró como el lugar de reunión de la familia. La cimentación de la casa son las rocas del lugar, y algunas de ellas sobrepasan el ancho forjado de la primera planta asomándose junto a la chimenea, lo que trae físicamente la cascada al interior de la casa. Además se refuerza el concepto de un núcleo vertical a través de una extensión del alza de la chimenea, que la hace el punto más alto del exterior de la casa.
La Casa de la Cascada consta de dos partes: la casa principal de los clientes que se construyó entre 1936 - 1938, y el cuarto de huéspedes que se completó en 1939. La casa original contiene habitaciones sencillas, proporcionadas por el arquitecto, con un estar abierto con cocina compacta en la primera planta y tres dormitorios pequeños en el segundo piso. El tercer piso fue el lugar de estudio y dormitorio del hijo de Kaufmann. Todos los recintos de la casa se relacionan con el entorno natural, y el estar incluso tiene escalones que conducen directamente al agua. Las circulaciones dentro de la casa son oscuras, pasillo estrechos, para que los habitantes tengan una sensación de encierro en comparación con lo abierto a medida que se acercan hacia el exterior. Los techos de las habitaciones son bajos, con el fin de dirigir la mirada horizontal hacia afuera.
La belleza de estos espacios se encuentra en sus extensiones hacia la naturaleza, hecho con largas terrazas en voladizo. Éstas, que están proyectadas hacia afuera en ángulos rectos, aportan un elemento de escultura a la casa, aparte de su función.
Para dar soporte a las terrazas, que ignoraban las fuerzas horizontales con sus grandes planos en voladizo, Wright trabajó con los ingenieros de Mendel Glickman y William Glickman. La solución estaba en los materiales de construcción. La casa tomó una forma de albañilería definitiva para relacionarla con el sitio y para las terrazas se decidieron por una estructura de hormigón armado y reforzadas con acero lo que aumento la resistencia a la tracción.
El exterior de la Casa de la Cascada impone una horizontalidad que se destaca gracias a los ladrillos y a los voladizos. Las ventanas de la fachada también tienen una condición especial, ya que se abren en las esquinas, rompiendo con la caja de la casa incorporando el extraordinario paisaje exterior.
Reconocimiento especializado
En enero de 1938, la Revista Time dedicó su portada a Lloyd Wright y definió la casa, recién terminada, como su "trabajo más atractivo".
En 1991, los miembros del American Institute of Architects declararon la casa como "la mejor obra de arquitectura norteamericana de todos los tiempos"
Ver además
- Museo Guggenheim diseñado por el arquitecto Frank Lloyd Wright